Fecha de publicación: 16 septiembre, 2014
El Instituto de Capacitación de FAGDUT realizará el miércoles 24 de septiembre en la sede nacional del mismo -Zeballos 1360, Rosario -, la Jornada Abierta para Estudiantes Secundarios “El futuro en tus manos”.
El Ps. Eduardo Marostica, director general del Instituto de Capacitación, nos cuenta cuáles son los objetivos de la jornada: “Lo que pretendemos es generar espacios para problematizar algunos escenarios laborales futuros, convocando a los jóvenes para invitarlos a pensar e imaginar cómo será el mundo laboral dentro de 10 años” y agrega, “la idea es plantear el interrogante en los participantes, de cuáles son las habilidades que van a ser necesarias saber dentro de ese marco laboral futuro, para poder actuar hoy”.
La jornada comenzará con una recepción en donde, mientras se completa la correspondiente acreditación, los participantes podrán interactuar con diferentes aplicaciones y tecnologías desarrolladas en el Instituto como también informarse sobre la oferta educativa del mismo para el corriente año y el 2015. Luego se dará paso al workshop dictado por la Lic. Veronica Mussio.
Con respecto a la modalidad utilizada para esta jornada, Eduardo Marostica aclara: “Luego de participar en varias ferias educativas, en donde nos sentimos limitados solamente a ofrecer una oferta académica de un modo publicitario, nos pareció interesante tanto para los estudiantes como para sus docentes, ofrecer un metodología de trabajo que permita reflexionar sobre cómo finalizando una etapa, como la secundaria, es importante contar con herramientas que nos permitan emprender, no sólo en el ámbito laboral sino en cada aspecto de la vida”.
Finalizando, el Director expresa su pensamiento sobre los jóvenes de hoy: “Me sorprende cada vez más la capacidad que tienen los chicos cuando se comprometen, pero para que suceda esto los jóvenes tienen que contar con referentes adultos; si uno es coherente, consecuente y logra ponerse en la piel de ellos y puede pensar desde sus problemas, tarde o temprano van a pedir ayuda, si esto sucede, se enciende en ellos un motor que los llevará a hacer siempre más. Después de esa etapa, el adulto tiene que seguirles el ritmo y brindar constantemente espacios donde puedan validar y discutir toda la información y experiencia acumulada en su camino”.